De recreo". Así eran aquellos veranos en Portopetro cuando, junto a su mejor amigo, navegaban por la costa balear. En Santañy, allá por 2005, el Mediterráneo estaba nutriendo a uno de los mejores deportistas españoles de la actualidad. Lo que no eran más que "vueltecitas" supusieron los primeros abrazos al mar de Marcus Walz. No superaba los doce años de edad, pero desde entonces siempre se interesó por competir a un alto nivel. Estrenó su casillero de buenos resultados en las pruebas autonómicas, para diez años después proclamarse campeón del mundo. Marcus acaba de ganar el mundial de piragüismo en la modalidad k2 500 metros y Rodrigo Germade fue su escudero en la República Checa. "En lo que se refiere a resultados, el piragüismo es el deporte rey de España", declara el campeón olímpico en una charla con El Confidencial.
Lo sentimos pero no se le permite ver el contenido Registrate.